La autoaceptación está arruinando la industria de la belleza

Mientras nuestro deseo por aceptarnos tal como somos con todos nuestros defectos incrementa y aceptamos las diferentes interpretaciones de la belleza, esta incomoda a dicha industria.

Los estándares de belleza son mucho más variados que hace unas décadas; encontramos algún atractivo en los defectos físicos y vemos una gran variedad de formas de cuerpos.

En la búsqueda de uno mismo hemos abandonado los productos anti-envejecimiento y con esto la venta de productos especializados en el envejecimiento ha bajado por primera vez en muchos años.

Los millennials no sienten la necesidad de consumir estos productos, su pensamiento se centra en aceptar quién eres y como se ven sin sentir que tienen que entrar en algún molde.

Además de esto las exigencias sobre estos productos no son las mismas, pues antes se interesaban en los efectos a largo plazo, esperando pacientemente los resultados y los millennials nos les gusta esperar.

Su enfoque es en productos naturales o clínicos que tienen resultados inmediatos y como esto es difícil de obtener en productos del cuidado de la piel, encuentran la solución de belleza en los cosméticos.

Pues a pesar de que la venta de productos para el cuidado de la piel va en baja la categoría de los maquillajes va a la alza.

Puede que no estén totalmente listos para aceptar la belleza de un rostro sin maquillaje pero por lo menos no tenemos tanto miedo de envejecer como nuestros padres.