Cambia tus hábitos y reduce el riesgo de padecer cáncer de mama

Durante los últimos años se ha hablado mucho acerca del cáncer de mama de la importancia de la autoexploración y de mantenerse alerta para prevenirlo.

De acuerdo a la Asociación Americana del Cáncer, el cáncer de mama se origina cuando se genera un crecimiento descontrolado de las células del seno, formando tumores o protuberancias, cuando el tumor es maligno las células pueden crecer e invadir los tejidos, huesos o áreas distantes del cuerpo.

El cáncer de seno es casi exclusivo en las mujeres, pero los hombres también corren el riesgo de padecerlo, aunque la incidencia es muy poco frecuente.

Los riesgos de contraer cáncer de mama aumentan considerablemente con la vejez, por lo que a medida que aumenta la edad es necesario continuar con los exámenes de seno y mamografías regulares.

Los antecedentes familiares de cáncer de mama o de ovario, la raza, etnia, tejido mamario denso, sobrepeso u obesidad son otros de los factores de riesgo de padecerlo.

El cáncer de mama suele ser tratable y curable si se trata de forma adecuada, pero prevenirlo siempre será la mejor opción, para detener estas células a tiempo es primordial la detección temprana.

Pero también existen cambios que podemos hacer en nuestra vida cotidiana que pueden reducirlo considerablemente, especialmente la dieta y el ejercicio.

Es importante incluir en nuestra dieta verduras como el brócoli, col, coliflor, entre otras y reducir la ingesta de grasas saturadas provenientes de la carne, lácteos y grasas procesadas.

Disminuir o limitar el consumo de alcohol, pues diferentes investigaciones han comprobado que el consumo de bebidas alcohólicas aumentan el riesgo de contraer cáncer de mama, al aumentar los niveles de estrógeno y otras hormonas asociadas con éste.

Tomar vitamina D puede ayudar a controlar el crecimiento de las células de la mama y hasta puede ser capaz de detener el crecimiento de las células cancerígenas.

Es importante hacer ejercicio de perdido cuatro veces a la semana y mantener un peso saludable pues el índice de masa corporal está estrechamente relacionado con el riesgo de cáncer de mama y bajar de peso ayuda a reducir el riesgo.