Petofilia, cuando el amor a tu mascota se convierte en trastorno

Con el paso del tiempo se ha hecho más frecuente ver como la relación entre los humanos y las mascotas se hace más intensa.

El excesivo apego a los animales se puede ver en las redes sociales que se han llenado de fotos y vídeos de gatitos, perros y otras especies de mascotas.

El periodista norteamericano Jon Katz, escribió sobre este comportamiento, “el cariño a los animales pasa a ser un problema cuando se convierte en adicción”.

La petofilia puede llegar a hacer sentir a las personas insatisfechas al tener contacto humano, por lo que sólo se sienta bien al relacionarse con seres irracionales.

Tratar a un animal como si fuera una persona o un miembro humano de la familia puede llegar a rozar en la paranoia.

No es malo querer a un animal, cuidarlo y mimarlo, pero si el querer convertirlos en personas, vestirlos, ponerles joyas o llenarlos de lujos innecesarios.

Un claro ejemplo es el de la socialite Paris Hilton, que en numerosas ocasiones ha mostrado el amor excesivo por sus mascotas, a quién llena de joyas y les construyó su propia mansión.

PARISSSS

Sin embargo no hay que olvidar que son animales y que no hay que quitarles su identidad, pues esto puede causarle más problemas de los que crees.