Melolagnia, la excitación sexual al escuchar música. La música tiene el poder de volver lo pasado presente, de transportarte a lugares y momentos, hacernos sentir toda clase de emociones, incluyendo la excitación sexual, a este fenómeno se le conoce como melolagnia. La música tiene el poder se hacer producir emociones La melolagnia es una parafilia que radica no en el acto sexual, sino en que la fuente de placer proviene de una melodía y no siempre es porque tenga carácter erótico y sensual, si no por el placer que siente la persona al escuchar música. Tonos, voces, notas y todo lo que rodea la composición musical se mezcla para crear esa química en nuestro cuerpo. Tonos, voces, notas y todo lo que rodea la composición musical se mezcla para crear esa química en nuestro cuerpo. Pero, no es la única parafilia ( patrón de comportamiento sexual en el que la fuente predominante de placer se encuentra en objetos o situaciones atípicas) que existe con respecto al sonido, están también la acusticofilia el elaudioerotismo, la ofolagnia y la ligirofilia. La acusticofilia En ella, la excitación sexual se produce cuando escuchamos sonidos específicos a través de las paredes. El audioerotismo El audioerotismo Aquí, el placer surge cuando se escuchan conversaciones íntimas, suspiros o gemidos sexuales y otros sonidos con connotación erótica y que procedan de otra pareja. La Ligirofilia Es ese placer sexual que se obtiene cuando se escuchan ruidos fuertes. Existen varias parafilias producidas por el sonido Así de poderoso puede ser un sonido o melodía.