Cuidado con lo que comes podría ser lo último

Sabemos que toda la comida que ingerimos está registrada por la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) que regula y verifica que todo lo que tomamos y comemos no es dañino para nuestro cuerpo. Pero aunque pareciera increíble, la comida que ingerimos tiene partículas de radiación y otras partículas no tan saludables para nosotros.

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Las formas radioactivas de los elementos se llaman radioisótopos o radio núcleos y existen de manera natural, esto significa que es inevitable su presencia en los alimentos que consumimos y el agua que bebemos, desde la leche y los cereales hasta las patatas o el pescado.

La radioactividad se pasa a animales y cosechas a través de las rocas y minerales del suelo. Además toda el agua de la tierra contiene pequeñas cantidades de uranio disuelto y de torio.

¿Alimentos más radiactivos?

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Uno de los alimentos que más radiación tiene son las nueces de Brasil, porque los árboles que las producen tienen unas raíces muy extensas que absorben el material del suelo. El plátano, contiene de manera natural un nivel de radiación alto comparado con otros alimentos.

Según datos del USNRC estos son algunos de los alimentos que mayor contenido de radiación natural tienen (medido en picocuries por kilogramo):

Nueces de Brasil
Habas, frijoles o porotos
Bananas
Zanahorias
Papas o patatas
Carne roja

La exposición a la radioactividad presente en la comida es en general inofensiva para nuestra salud y de todos modos, existen muy pocas posibilidades de reducirla en la dieta.