Comer pizza tiene los mismo efectos que la heroína

Según estudios neurológicos han detectado que comer pizza en altas cantidades podría elevar tu dependencia a este alimento pues los patrones biológicos son parecidos a la heroína. La investigación explica que las personas que sufren de los síntomas de adicción a la comida muestran una incremento de la actividad cerebral en las regiones relacionadas con la recompensa.

¿Qué alimentos provocan adicción?

Cualquier persona puede tener una fruta, verdura o grano favorito y consumirlo asiduamente, atendiendo a cuán agradable le parece su sabor sin causar efecto negativo alguno en ella. Sin embargo, algunos alimentos pasan por procesos específicos que cambian sus características naturales, un ejemplo de ellos es la pizza.

La pizza provoca una reacción similar a la cocaína y heroína en el cerebro. Se trata de un alimento compuesto, que además de las propiedades naturales de cada uno de sus ingredientes, contiene azúcares, grasas y carbohidratos refinados, todas características añadidas que aumentan su sabor y producen un resultado inesperado en el cerebro, distinto al de cualquier alimento natural.

Al mismo tiempo, las materias primas necesarias para hacer una pizza son sometidas a procesos donde las fibras, proteínas y el agua que contienen naturalmente son eliminadas, provocando una absorción cada vez más rápida de los carbohidratos en el organismo.

La clave de la adicción

Algo similar ocurre con la cocaína, un poderoso estimulante del sistema nervioso central que activa el sistema de recompensa, alimentando un círculo vicioso que provoca un estado de bienestar acompañado de euforia y sensaciones positivas.

El mecanismo resulta idéntico al de la heroína o cocaína: a mayores estímulos, mayor es la recompensa y mayor la necesidad de consumirla de nuevo. Este esquema se repite con la pizza, el chocolate, los pasteles y otros alimentos que se caracterizan por su alto contenido de azúcares refinadas y el complejo proceso que atraviesan antes de llegar a su consumidor final.

La conclusión anterior podría funcionar como una explicación somera del dramático aumento de la obesidad y el sobrepeso en el mundo occidental, condiciones médicas relacionadas con una dieta alta en alimentos procesados y carbohidratos de alta absorción.

Desde un enfoque científico basado en los datos anteriores, ¿podrían considerarse víctimas de una adicción a las personas que sufren de estas afecciones? ¿Qué hacer ante una industria alimenticia mundial especialmente preocupado por las ganancias a través del consumo y no por la salud de los consumidores?