Es un candado de acero y carbono hecho para bicicletas.

El candado puede provocar náuseas y vómito si alguien intenta robar el vehículo ya que expulsa un compuesto químico cuando intentan romperlo.

El olor que libera cuando el ladrón ha cortado aproximadamente un 30% de su estructura es muy parecido al que expulsan los zorrillos cuando se sienten atacados .

Sus inventores, Daniel Idzkowski y Yves Perrenoud, viven en San Francisco.

A los dos jóvenes se les ocurrió crear este candado después de que ellos y sus amigos por varias ocasiones fueran víctimas del robo de sus bicicletas,

El candado se puede conseguir a partir de 109 dólares